Desafiarte a ti mismo es bueno para mejorar, pero todos tienen un límite de 24 horas al día. Se considera que 5 objetivos concurrentes son suficientes.
Un objetivo debe ser lo suficientemente ambicioso como para hacerte sentir ligeramente incómodo, de lo contrario, no necesitas OKRs. Debería ser una tarea difícil de lograr en poco tiempo.
A todos les encantan los números y el dinero, pero un objetivo no debe basarse únicamente en métricas. Debe ser inspirador, un llamado a la acción que te haga saltar de la cama, listo para un nuevo día y un nuevo desafío.
A diferencia del Objetivo, que debe ser ambicioso, el Resultado Clave debe poder medir el porcentaje de logro. Y debes realizar un seguimiento constante al menos quincenalmente para conocer su progreso.
Un buen Resultado Clave es algo que puedes medir a lo largo del tiempo; de lo contrario, es solo una acción que debes realizar. Por ejemplo, "Pensar en la mejora de tu día" definitivamente no es un resultado clave. Uno mejor sería "Dedicar 30 minutos al día a la lectura". Después de lograrlo, puedes agregar más resultados que demuestren que tu día es más significativo.
Hacer un seguimiento del progreso es fundamental para avanzar en cualquier cosa. Te ayuda a conocer el estado actual y a planificar acciones para lograrlo. Asegúrate de revisar regularmente tus resultados clave para seguir tu progreso, gestionar tu ritmo y esfuerzo, y buscar orientación para los próximos pasos.
Pierdes el 100% de los tiros que no intentas.
